Estrategias
Este texto se ocupa de las estrategias, en sentido amplio. La estrategia consiste en reunir medios heterogéneos y acciones disímiles para alcanzar objetivos globales. Esta acción no es “lógica” en el sentido estricto del término, porque implica tener en cuenta, en una misma línea de razonamiento, variables de naturaleza diversa, algunas de las más importantes de las cuales no pueden cuantificarse. Combina personas y cosas, magnitudes y cualidades, necesidad y contingencias. Además, se enfrenta a una dificultad adicional: el progreso tecnológico deja rápidamente obsoletas las lecciones de la experiencia, de modo que los precedentes rara vez pueden servir de ejemplo. Mientras que el pensamiento táctico tiende a centrarse en un ámbito específico, como el militar, el industrial o el comercial, el pensamiento estratégico combina diversas acciones para alcanzar un objetivo global. Por eso requiere lo que Platón llamaba la mirada sinóptica del dialéctico. Sin embargo, sería un error creer que el pensamiento estratégico es superior a la habilidad táctica: sin ella, la estrategia no es nada, ya que no hay detalle en la ejecución.
La estrategia, así entendida, es la conducción y la aplicación, por los mejores medios, de una política.