Inversiones para la Jubilación

Este elemento es una expansión del contenido de los cursos y guías de Lawi. Ofrece hechos, comentarios y análisis sobre inversiones para la jubilación. En inglés: Retirement Investments. Véase también un análisis sobre el “Ahorro para la Jubilación“.

Planes e Inversiones para la Jubilación

Un plan de jubilación es un acuerdo financiero que proporciona ingresos a una persona cuando se jubila. Los trabajadores de muchos países desarrollados suelen jubilarse a los 65 años o alrededor de esa edad, con importantes intentos en el siglo XXI de subir tal edad. Cuando se jubilan y dejan de percibir un salario, los planes de jubilación en los que están inscritos les proporcionan el dinero que necesitan para mantener su nivel de vida.

Los planes de jubilación suelen ser creados por el antiguo empleador de la persona que se jubila, aunque las compañías de seguros, los organismos gubernamentales y los sindicatos también pueden crear planes. El dinero que el plan de jubilación paga al jubilado procede de un fondo al que éste, cuando estaba empleado, contribuía regularmente. Normalmente, la empresa descuenta la cantidad aportada de cada nómina que recibe el empleado y la coloca en un producto de inversión, como las acciones. Tanto si la inversión gana dinero como si lo pierde, se guarda en la cuenta de jubilación hasta el momento en que el empleado deja de trabajar, y entonces se le abona. Los pagos que el plan de jubilación debe al empleado se denominan prestaciones.

Un plan de jubilación que garantiza al empleado participante una prestación mensual específica en el momento de la jubilación se denomina plan de prestaciones definidas. Estas prestaciones suelen continuar hasta que el ex-empleado, y a menudo el cónyuge, fallece. Este tipo de plan puede proporcionar una cantidad concreta de dinero cada mes, que suele depender del nivel salarial del partícipe y de cuántos años haya pertenecido al plan. En general, el partícipe no toma decisiones sobre cómo se invierte el dinero; la institución que gestiona el plan de jubilación se encarga de todas las decisiones de inversión. En muchos planes, tanto el empresario como el trabajador aportan dinero al plan. Los planes de prestaciones definidas se denominan a veces planes de pensiones de capitalización total.

Un plan de jubilación que ofrece una cuenta individual para cada partícipe y basa la prestación en la cantidad de dinero aportada así como en el rendimiento de las inversiones se denomina plan de aportaciones definidas. La cuantía de la prestación abonada es menos previsible que en un plan de jubilación definido. Además, es el empleado, y no la institución, quien asume el riesgo de la inversión. Algunos ejemplos de planes de aportaciones definidas son los planes 401(k), los planes 403(b), los planes de participación de los empleados en el capital y los planes de participación en los beneficios.

La mayoría de los planes de jubilación son planes de prestaciones definidas o planes de aportaciones definidas, pero algunos planes de jubilación, denominados planes híbridos, combinan características tanto de los planes de prestaciones definidas como de los planes de aportaciones definidas.

Historia

Hasta la década de 1870, la mayoría de las empresas de Estados Unidos eran pequeñas empresas familiares que no contaban con planes formales para proporcionar dinero a los empleados una vez jubilados. La mayoría de los estadounidenses seguían trabajando como agricultores y era más típico que los estadounidenses de más edad siguieran implicados en el trabajo en la vejez, orientando a los trabajadores más jóvenes aunque no tuvieran resistencia o altos índices de productividad. En 1875, la American Express Company estableció el primer plan de pensiones privado de Estados Unidos.

Entre 1875 y 1929, los planes de pensiones privados se fueron popularizando gradualmente en Estados Unidos y Canadá. Algunas de las principales empresas estadounidenses que establecieron planes en este periodo fueron Standard Oil of New Jersey, U.S. Steel Corporation, General Electric Co., American Telephone and Telegraph Co., Goodyear Tire and Rubber Co. y Eastman Kodak Co. En 1940, 4,1 millones de trabajadores del sector privado (el 15% de todos los trabajadores del sector privado) estaban cubiertos por planes de pensiones.

En 1935, el presidente Roosevelt firmó la Ley de Seguridad Social, un programa de seguro social patrocinado por el gobierno federal que proporcionaba prestaciones a los jubilados y a los desempleados, así como una prestación a tanto alzado en caso de fallecimiento. El gobierno recaudó dinero para este programa imponiendo un impuesto sobre los salarios de los trabajadores. La Seguridad Social no garantizaba la seguridad financiera de los jubilados, por lo que la introducción del programa no afectó radicalmente a la tendencia de los trabajadores de más edad a aplazar la jubilación hasta que ya no podían físicamente con el trabajo. Incluso en los años 50, el concepto de jubilación no se había generalizado.

En la década de 1940, el gran fabricante de automóviles estadounidense General Motors estaba presidido por Charles Erwin Wilson (1890-1961). Wilson diseñó el primer fondo de pensiones moderno de GM, que se diferenciaba de otros planes de pensiones porque permitía a los empleados elegir invertir en todas las acciones cotizadas en bolsa, no sólo en acciones de GM. En 1990, 39,5 millones de trabajadores del sector privado (el 43% de todos esos trabajadores) estaban cubiertos por un plan de pensiones.

El plan 401(k) se desarrolló a partir de las reformas de 1978 del Código de Rentas Internas destinadas a fomentar las tasas de ahorro en EE.UU. Su nombre deriva de una parte del código -la sección 401(k)- que permitía a los empleados apartar fondos de jubilación con impuestos diferidos.

El primer programa se puso en marcha en 1981. En el año 2000, más de tres cuartas partes de los trabajadores estadounidenses participaban en planes 401(k). Muchas empresas llegaron a ofrecer planes 401(k) además de, o en lugar de, los planes de pensiones tradicionales patrocinados por la empresa.

El Servicio de Impuestos Internos limita la cantidad que una persona puede aportar a su plan 401(k) en un año determinado. Para el ejercicio fiscal 2023, el límite base era de 22.500 $, con una aportación adicional de recuperación de 7.500 $ para cualquier persona mayor de 50 años.

Información más detallada

En Estados Unidos, las personas que siguen el patrón común de trabajar hasta los 60 o 70 años suelen jubilarse y empezar a vivir de los ingresos de su cuenta de ahorros, del programa gubernamental de la Seguridad Social o de un plan de jubilación como una cuenta IRA (o una combinación de los tres). Existen muchos tipos diferentes de planes de jubilación y diversas leyes y reglamentos fiscales que se les aplican.

Un plan de prestaciones definidas proporciona a los empleados prestaciones de jubilación que están predeterminadas por factores como su salario, el número de años que han trabajado en una organización y su edad cuando se jubilen. Este tipo de plan puede ser financiado, lo que significa que el empresario también ha contribuido al fondo de inversión. La mayoría de los planes de prestaciones definidas son financiados porque los gobiernos de muchos países, incluidos Estados Unidos, el Reino Unido y Australia, los fomentan ofreciendo incentivos fiscales si los particulares y las empresas contribuyen a ellos. Un plan de prestaciones definidas también puede ser un plan no financiado, lo que significa que ni el empleado ni el empresario apartan fondos de forma regular. Las prestaciones de estos planes salen de los impuestos y de las cotizaciones de los trabajadores actuales, como en el caso del sistema de la Seguridad Social en Estados Unidos. El partícipe de un plan de prestaciones definidas no tiene que demostrar su capacidad de ahorro para recibir la prestación de dicho plan.

Un plan de cotizaciones definidas otorga al empleado la responsabilidad de elegir los tipos de inversiones a utilizar, que van desde los fondos de inversión a las acciones individuales, pasando por los valores mobiliarios. Algunos de estos planes ofrecen al empresario la posibilidad de aportar una cantidad equivalente en dólares a las contribuciones del empleado. Estos planes suelen restringir la posibilidad de que el partícipe retire fondos del plan antes de alcanzar una determinada edad (normalmente 59,5 años) sin que se le aplique una penalización.

Los planes de cotizaciones definidas que se utilizan habitualmente incluyen los planes 401(k), las cuentas individuales de jubilación (IRA), los planes Keogh y los planes de participación en los beneficios.

El plan 401(k), a veces denominado plan de reducción salarial, es un plan de jubilación que se ofrece a los empleados de la mayoría de las grandes empresas y de muchas pequeñas. Los empleados pueden contribuir al plan 401(k) haciendo que se les deduzca de su nómina una cantidad determinada de dólares antes de impuestos. Por lo general, se permite al empleado elegir entre diversas opciones de inversión. Estas opciones consisten en diferentes fondos de inversión que hacen hincapié en las acciones, los bonos y las inversiones en el mercado monetario. Los empleadores suelen igualar parte de la aportación del empleado, lo que supone un incentivo para que éste ahorre más dinero para la jubilación. El empleado no paga impuestos hasta que empieza a retirar dinero, lo que debe hacer entre los 59,5 y los 70,5 años.

Una cuenta IRA es una cuenta de jubilación que permite al individuo apartar dinero cada año hasta que comience a retirarlo a la edad de 59,5 años o más. Los planes IRA son planes de impuestos diferidos, lo que significa que el pago de una parte o la totalidad de los impuestos se aplaza, o se pospone, hasta una fecha futura, en lugar de hacerlo en el año en que la inversión genera ingresos. A diferencia de un plan 401(k), una cuenta IRA está financiada en su totalidad por el contribuyente individual.

Un Plan Keogh es un plan de jubilación similar al 401(k) y a la IRA, pero está destinado a los trabajadores autónomos o empleados por empresas no constituidas en sociedad. El Plan Keogh también se conoce como HR 10 y, al igual que ocurre con las cuentas IRA, las ganancias de sus inversiones tienen impuestos diferidos hasta que el jubilado retira el capital del plan, lo que debe hacer entre los 59,5 y los 70,5 años o asumir una penalización del 10%. Normalmente, las personas que utilizan los planes Keogh invierten su dinero en combinaciones de acciones, bonos, fondos del mercado monetario y fondos de inversión.

Un plan de participación en los beneficios es aquel que proporciona a los empleados una parte de los beneficios de la empresa. No es obligatorio que la empresa contribuya al plan; también puede decidir qué parte de los beneficios se repartirá y puede realizar aportaciones de participación en los beneficios tanto si la empresa ha sido rentable como si no lo ha sido en un año determinado. Cuando se instituye, cada empleado recibe un porcentaje de los beneficios basado en las ganancias de la empresa, un acuerdo que suele darles un fuerte sentido de propiedad en la empresa.

Un plan 403(b), también llamado plan de anualidades con protección fiscal, es similar a un plan 401(k), pero lo ofrecen organizaciones sin ánimo de lucro, como escuelas públicas, universidades y organizaciones benéficas, en lugar de empresas. Un plan 403(b) puede adoptar la forma de un contrato de renta vitalicia, que es un programa proporcionado por una compañía de seguros. También puede adoptar la forma de una cuenta de custodia, que invierte las aportaciones en fondos de inversión. Por último, puede ser una cuenta de ingresos para la jubilación que se establece para los empleados de la iglesia. Las aportaciones al plan 403(b) no se gravan hasta que el empleado comienza a retirarse del plan, lo que suele ocurrir después de la jubilación.

Tendencias más recientes

Los planes de jubilación con prestaciones definidas se popularizaron en los años posteriores a la Segunda Guerra Mundial (1939-45). A finales de los años 70, aproximadamente el 62% de todos los trabajadores en activo de Estados Unidos estaban cubiertos exclusivamente por planes de prestaciones definidas, según el Employee Benefit Research Institute. Después de este pico, la participación de las empresas en estos planes disminuyó gradualmente y, en 1997, sólo el 13 por ciento de los trabajadores tenía un plan de pensiones como única prestación de jubilación. A medida que los planes de prestaciones definidas han ido perdiendo popularidad, la de los planes de cotizaciones definidas ha aumentado. La cantidad de trabajadores en activo con un plan de aportaciones definidas y sin pensión era del 16 por ciento en 1979, pero en 2004 esa cifra había aumentado hasta el 62 por ciento.

Al mismo tiempo que más personas han pasado a estar cubiertas por planes de aportación definida, una serie de quiebras en grandes industrias corporativas como la siderurgia, las aerolíneas y los recambios de automóviles ha tenido el efecto de trasladar la carga de la gestión de la jubilación a los empleados. Muchos de los baby boomers (personas nacidas entre 1946 y 1964) han sido testigos de una reducción de las fuentes estables de ingresos para la jubilación a finales del siglo XX y principios del XXI. Al mismo tiempo, la esperanza media de vida no ha dejado de aumentar, lo que significa que los jubilados necesitan repartir sus ingresos de jubilación a lo largo de más tiempo, por término medio, que las generaciones anteriores de jubilados.

Estos factores, sumados a las bajas tasas de participación en los planes 401(k), las retiradas de fondos antes de la jubilación y las bajas tasas de ahorro en general, han hecho que más de casi tres cuartas partes de los hogares en edad de trabajar corran el riesgo de ver disminuir su nivel de vida durante la jubilación, según el Centro de Investigación sobre la Jubilación. La Seguridad Social sólo sustituye aproximadamente un tercio de los ingresos previos a la jubilación para el asalariado medio que se jubila a los 62 años.

Planes 401(k): Aspectos básicos

En Estados Unidos, un 401(k) es un programa de ahorro para la jubilación organizado por los empresarios pero financiado principalmente por los trabajadores a través de las deducciones de sus nóminas. Dado que los trabajadores no suelen efectuar retiradas del fondo hasta después de haberse jubilado, el 401(k) se considera un plan de retribución diferida.

Una vez que una empresa ha establecido un plan 401(k), se ofrece a los empleados la opción de aportar una parte de sus ingresos al plan de jubilación. Muchos empleadores igualan un determinado porcentaje de la aportación de cada empleado. La mayoría de los planes ofrecen la opción de invertir entre fondos de inversión de renta variable y renta fija, y suelen ofrecer fondos con fecha objetivo, en los que el nivel de riesgo de la cartera se ajusta a medida que se acerca la fecha objetivo, generalmente a la edad de jubilación o cerca de ella.

Muchos empleadores ofrecen la posibilidad de elegir entre dos tipos: tradicional y Roth.

401(k) tradicional. El dinero sale de su nómina antes de impuestos. Sin embargo, tendrá que pagar impuestos sobre los reintegros después de jubilarse. (Si recurre a sus ahorros antes de cumplir los 59 años y medio, es posible que también tenga que pagar penalizaciones por retiro anticipado).
Roth 401(k). En un plan Roth, usted paga impuestos sobre la totalidad de su nómina por adelantado, pero los ahorros y las ganancias de las inversiones crecen libres de impuestos. Los retiros de los planes Roth 401(k) están libres de impuestos a partir de los 59 años y medio.

Los empleados pueden traspasar fondos de una cuenta existente patrocinada por la empresa a una nueva cuenta, lo que resulta útil para quienes cambian de trabajo o se jubilan.

¿Cuál es la diferencia entre un 401(k) y una cuenta IRA?

Cuando se consideran los planes de jubilación con ventajas fiscales, vienen a la mente dos principales: la cuenta de jubilación individual (IRA) y el plan 401(k).

Revisor de hechos: Mix

Inversiones para la Jubilación: “Ingresos pasivos, jubilación agresiva”

El libro “Ingresos pasivos, jubilación agresiva” (2019), por Rachel Richards, es una hoja de ruta hacia la libertad financiera a través de fuentes de ingresos diversificadas como los bienes inmuebles, las acciones y otras formas de ingresos pasivos (véase más detalles). A medida que los planes de jubilación tradicionales quedan obsoletos, la independencia financiera emerge como el nuevo objetivo. Descubra las herramientas para elaborar su próspera narrativa financiera.

El secreto de la libertad, la flexibilidad y la independencia financiera (¡y cómo empezar!)

“El secreto de la libertad, la flexibilidad y la independencia financiera (¡y cómo empezar!)” es el subtítulo del libro, y un buen indicador de su contenido, o al menos de las promesas que encierra.

Aprovechar el poder transformador de los ingresos pasivos es la forma más rápida de alcanzar la libertad financiera y el estilo de vida de sus sueños, sostiene el libro. Comprendiendo las diversas fuentes de ingresos, invirtiendo sabiamente en alquileres inmobiliarios, estableciendo objetivos claros y tomando medidas con conocimiento de causa, allanará su camino hacia un futuro más satisfactorio. Otra opción de estudio aquí es Pasivo Exigible y el Pasivo no Exigible.

Recuerde, con dedicación y las estrategias adecuadas, puede forjar la vida que siempre ha imaginado, afirma el libro.

La portada del libro dice:

“Dos millones de dólares. Esa es la cantidad de dinero que cualquier persona menor de 40 años necesitará acumular para jubilarse. A menudo, eso significa trabajar 40 horas semanales y pellizcar los céntimos toda la vida. ¿De qué otra forma podría ahorrar la friolera de dos millones de dólares?

Gurú de las finanzas, ex asesora financiera y autora del bestseller de Amazon Money Honey, Rachel Richards tiene un objetivo en mente: enseñarle todo lo que necesita saber para ser financieramente libre antes de lo que nunca creyó posible. A los 27 años, Rachel dejó su trabajo y se jubiló, viviendo de más de 10.000 dólares al mes en flujos de ingresos pasivos. Deje que ella le muestre cómo hacerlo a cualquier edad: nunca es demasiado tarde.

¿Qué son los ingresos pasivos? Los ingresos pasivos se obtienen con poco o ningún trabajo continuo. No es un plan para hacerse rico rápidamente, pero una vez que sus ingresos pasivos superen sus gastos, estará listo para toda la vida.

En una guía práctica refrescante y realista, Rachel presenta 28 modelos probados y reales de flujos de ingresos pasivos, que le ayudarán a:
– Alcanzar el FIRE (Independencia Financiera, Jubilación Anticipada) sin escatimar en gastos
– Crear ingresos residuales constantes y a largo plazo (a la manera no-MLM), para que pueda vivir la vida a su manera
– Tener la flexibilidad de trabajar cuándo, dónde y si quiere
– Diga “adiós” a su horario de 9 a 5, y cree una vida que le guste totalmente
– Elimine sus tensiones y miedos relacionados con el dinero

Principiante o no, al final de Ingresos pasivos, jubilación agresiva, sabrá exactamente lo que hace falta y cómo empezar. Los ingresos pasivos son reales y alcanzables para todos, incluso para usted. ¿Está listo para unirse al movimiento?”

Descubra los secretos de la libertad financiera y el estilo de vida de sus sueños

Imagine que está descansando en un pintoresco café en el corazón de París. Está sorbiendo un café recién hecho, viendo pasar el mundo, sabiendo que sus facturas están pagadas y que su saldo bancario no deja de crecer. Ese es el sueño, ¿verdad? Muchos creen que un estilo de vida así está reservado a unos pocos afortunados, los que ganan la lotería o heredan una fortuna. Pero, ¿y si no se trata de suerte? ¿Y si se trata de comprender y aprovechar el potencial de los ingresos pasivos?

Basado en la experiencia de varios autores, mis opiniones y recomendaciones se expresarán a continuación (o en otros lugares de esta plataforma, respecto a las características en 2024 o antes, y el futuro de esta cuestión):

El camino hacia la libertad financiera no está pavimentado con esquemas para hacerse rico rápidamente, sino con elecciones informadas, planificación estratégica y esfuerzos constantes. El camino puede ser tortuoso, pero los destinos -ya sea un café parisino, una playa en Bali o simplemente tiempo de calidad con sus seres queridos- merecen cada paso.

En este libro y nuestro resumen del mismo, conocerá las estrategias clave para desbloquear estos destinos, descubrirá diversas vías de ingresos pasivos, comprenderá cómo aprovecharlas y aprenderá a forjar un futuro en el que sus finanzas alimenten sus sueños, no los dicten.

A continuación se presenta un resumen del libro.

Redefinir la jubilación en un mundo en transformación

Estamos en los años cincuenta. Una familia típica vive en una pintoresca casa de 1.000 pies cuadrados y comparte un coche, ajena a las presiones digitales de las redes sociales. La vida es más sencilla y la jubilación, basada en la “teoría de los huevos nidos”, parece alcanzable. Demos un salto hasta el presente, y factores como los gastos inflados de los hogares, el aumento vertiginoso de los costes universitarios, un sistema de seguridad social tenso y la desaparición de las pensiones han alterado drásticamente el panorama financiero. Hoy en día, las casas se extienden por encima de los 2.500 pies cuadrados, las familias hacen malabarismos con varios coches y el resplandor de la “vida perfecta” en las redes sociales estimula el aumento del gasto. Algunos piensan que trabajar más horas es la solución, pero es una trampa. La arcaica semana laboral de 40 horas sigue imperando, dejando poca flexibilidad para ahorrar o invertir.

La cuestión es que la jubilación no consiste sólo en dejar un trabajo. Se trata de la independencia financiera y la libertad de elección. Mientras que la sabiduría convencional insiste en un nido de huevos de 2 millones de dólares para una jubilación cómoda, considere lo siguiente: para lograr eso a partir de los 25 años, tendría que ahorrar 621 dólares cada mes durante 40 años, esperando un rendimiento del 8%. Cuando la realidad golpea, nos encontramos con que el ahorro medio para la jubilación de las personas que rondan los 50 años es de apenas 163.577 dólares. Confiar únicamente en el mercado bursátil es arriesgado; ¿recuerda 2008? Las incertidumbres de la vida, como los problemas de salud o el divorcio, también pueden asestar duros golpes a estos ahorros. Pero hay esperanza. La generación más joven está aprovechando el poder de los ingresos pasivos.

Valore su tiempo por encima del dinero. El dinero es reponible; el tiempo, no. Quizá ahorre unos céntimos en gasolina, pero ¿cuál es el coste del tiempo que pierde? Hacer concesiones inteligentes es crucial. Imagínese la felicidad que le produce externalizar tareas, lo que le deja los fines de semana libres. No se trata sólo de dinero; se trata de libertad. Los ingresos pasivos, a diferencia de los activos, no le atan a un escritorio. Es dinero ganado sin intercambiar constantemente su tiempo. Claro que requiere un trabajo inicial: crear un curso en línea, por ejemplo. Pero una vez establecido, es un flujo que sigue fluyendo. Desde los derechos de autor de libros, como los que disfrutan autores como Stephen King, hasta los ingresos constantes de una propiedad de alquiler bien gestionada, las opciones son diversas.

Mientras reflexiona sobre estas fuentes de ingresos, considere su escalabilidad, controlabilidad, inversión requerida, comerciabilidad y, por supuesto, pasividad. Sea estratégico. Los ingresos pasivos no consisten en hacerse rico rápidamente, sino en crear una riqueza duradera.

Así que, a medida que la idea tradicional de jubilación se desmorona y las normas de los años 50 se desvanecen, ¿está preparado para pivotar? Sumérjase en el reino de los ingresos pasivos. El futuro no consiste en ahorrar, sino en ganar estratégicamente.

Profundicemos en esas seductoras vías de ingresos pasivos.

Desentrañar la magia de los derechos de autor

Usted se ha volcado en cuerpo y alma en la creación de algo, puede que sea un libro, una canción o un curso en línea. Ahora, en lugar de limitarse a sentir la satisfacción del trabajo bien hecho, cada vez que alguien compra o utiliza su creación, un poco de dinero llega a su cuenta. ¿Le suena bien? ¡Esa es la magia de los derechos de autor!

El mundo de los derechos de autor es fascinante, especialmente en lo que se refiere a los esfuerzos creativos o artísticos. Para empezar, ¿sabía que los derechos de autor pueden proceder no sólo de los libros y la música, sino también de la fotografía, las aplicaciones e incluso las franquicias? Las posibilidades son inmensas. Una de las cosas increíbles de los derechos de autor es su escalabilidad. Esencialmente, usted crea una vez y puede ganar repetidamente.

Para ganar derechos de autor, primero tiene que crear algo que la gente quiera. Es como prepararse para una charla TED. ¿Cuál es su tema? ¿Cuál es su perspectiva o habilidad única? Dibujar un gráfico de burbujas de lluvia de ideas puede ayudarle. Una vez que tenga una idea, haga algo de trabajo detectivesco. Sitios como Amazon pueden darle una idea de lo que ya existe y dónde podría estar su nicho.

Hablando de libros, todo autor sabe que escribir es sólo el principio. Después de verter su alma en las páginas, ¡tiene que asegurarse de que la gente realmente lo lea! Aquí es donde entra en juego el marketing. Tiene que hacer algo más que escribir un libro; tiene que asegurarse de que llega a manos de lectores ávidos.

Ahora bien, si está pensando en escribir un libro, tiene dos opciones: seguir la vía de la edición tradicional o tomar las riendas con la autopublicación. Con la publicación tradicional, un editor se encarga de todo, desde la edición hasta la comercialización. Pero usted ganará una parte menor de los derechos de autor, normalmente en torno al 8-15 por ciento. Por otro lado, la autopublicación significa que usted lleva todos los sombreros, pero puede ganar entre un 35 y un 70% en derechos de autor. Basta con mirar a Hal Elrod. Ganó más de 700.000 dólares al año con su libro autopublicado La mañana milagrosa.

Pero no nos olvidemos de los músicos. Su trayectoria es algo similar a la de los autores. Una melodía puede hacerles ganar derechos de autor por las ventas, las emisiones radiofónicas o incluso cuando se utiliza en películas o anuncios. Pero, al igual que con los libros, la creación es sólo la mitad de la batalla. Asegurarse de que su música llega a su público es vital.

Por último, independientemente de lo que cree, recuerde que los ingresos pasivos no significan ausencia de esfuerzo. El éxito de los ingresos por derechos de autor a menudo se basa en un marketing eficaz. Comprométase con su público, únase a grupos relevantes, considere algún tipo de publicidad de pago y, lo más importante, mantenga el impulso incluso después del lanzamiento.

Y ahora, mientras reflexiona sobre estas ideas, probablemente se esté preguntando si existen otras formas de obtener ingresos pasivos. Pues bien, profundicemos y averigüémoslo en la siguiente sección.

Surcando las olas de los ingresos de cartera

¿Alguna vez ha fantaseado con tomar cócteles en una playa mientras su cuenta bancaria sigue creciendo? No es un sueño lejano si aprovecha el poder de las rentas de cartera: su dinero trabajando incansablemente para usted, día y noche, con los dividendos goteando como suaves olas en esa playa soleada. Suena idílico, ¿verdad? Vamos a desglosarlo.

Los ingresos de la cartera, en esencia, son lo que usted gana con sus inversiones. Piense en los dividendos de las acciones, los intereses de los bonos y otros instrumentos financieros. Digamos que invierte en una acción como Apple, que, por poner un ejemplo, paga una rentabilidad por dividendo del 1,3%. Con una inversión de 50.000 dólares, ganaría la friolera de 650 dólares anuales sin mover un dedo. ¿Recuerda los años 80? No, no los calentadores de neón, sino los altísimos tipos de los cupones de los bonos, del 15%. Lamentablemente, los tipos actuales son un poco más humildes, rondando el 2 por ciento para las cuentas de ahorro. Para que usted gane unos significativos 2.000 dólares, necesitaría tener unos considerables 100.000 dólares aparcados en esa cuenta.

Pero hay más. Más allá de las vías tradicionales, una plétora de otras emocionantes estrategias de inversión están esperando a ser exploradas. ¿Ha oído hablar alguna vez de los préstamos entre iguales? Plataformas como LendingClub o Prosper actúan como casamenteros financieros, conectando a prestamistas con prestatarios. Aunque ofrecen tipos de interés más altos que las cuentas de ahorro tradicionales, vienen con un lado de riesgo: el riesgo de impago. Mientras tanto, las Sociedades Limitadas Maestras – MLP por sus siglas en inglés – tienen que ver con los recursos naturales, permitiéndole profundizar en los dividendos al convertirse en socio comanditario.

¿Un favorito de moda entre los inversores? Los fondos de inversión inmobiliaria o REIT. Piense en ellos como en un bufé de propiedades en el que puede invertir, disfrutando de la diversidad de activos inmobiliarios de varias ciudades sin poseerlos directamente. Es más, los REIT, por ley, tienen que distribuir el 90% de sus ingresos imponibles como dividendos a los inversores. También existen plataformas de crowdfunding inmobiliario como Fundrise, que ofrecen eREITs y una visión más cercana e íntima de las propiedades exactas que está respaldando.

Aun así, como ocurre con todas las inversiones, hay días nublados en el horizonte. Las recesiones económicas, como la Gran Recesión, pueden golpear duramente sus inversiones. Pero recuerde que es una noche de tormenta que da paso a un amanecer más brillante. El mercado puede caer, pero históricamente ha demostrado resistencia y recuperación. Adoptar una mentalidad a largo plazo es crucial. Se trata de navegar a través de mares agitados, creyendo en las costas soleadas que aguardan.

Al final, ya sea sumergiéndose en la profundidad de los bonos o explorando el vasto horizonte de los bienes inmuebles, el mar de los ingresos de cartera es vasto y variado. Pero mientras navega, recuerde dirigir su barco con la vista puesta en el horizonte, pues le esperan nuevas y emocionantes aventuras.

Dominar el arte de los ingresos pasivos a través del sector inmobiliario

Está sentado en su sillón favorito, saboreando una taza de té y contemplando la puesta de sol. Su teléfono suena: es una notificación sobre sus ingresos mensuales por alquiler que llegan a su cuenta bancaria. Este sueño es totalmente alcanzable con la estrategia inmobiliaria adecuada.

En el corazón de los ingresos pasivos a través del sector inmobiliario se encuentran las propiedades de alquiler. Puede que piense en viviendas, pero ¿ha considerado alguna vez la posibilidad de generar ingresos a partir de espacios de almacenamiento, aparcamientos o incluso alquileres de equipos? Los bienes inmuebles ofrecen tres ventajas principales: un flujo de caja constante, la revalorización del valor de la propiedad con el paso del tiempo y unas ventajas fiscales inestimables. Pero sumergirse requiere una inversión inicial. A menudo se aconseja a los recién llegados que empiecen por sus casas, convirtiéndolas en alquileres. Pero un consejo: no estire demasiado sus finanzas, un apalancamiento excesivo puede ser desastroso. Un jugador crucial en este juego es el administrador de la propiedad. Aunque puede que se lleven un pequeño porcentaje de sus ingresos -alrededor del 8%-, pueden hacer que su negocio de alquiler sea prácticamente manos libres. Imagínese que gestiona más de 100 propiedades, que le reportan unos importantes ingresos pasivos anuales, todo ello supervisado por un administrador de fincas de confianza.

La pregunta del millón es: ¿Cómo financia estas propiedades? Algunos optan por un acuerdo todo en efectivo, lo que elimina la necesidad de una hipoteca, mientras que otros utilizan el apalancamiento de los préstamos para minimizar los costes iniciales. Técnicas como el “hackeo de casas”, en el que usted compra una propiedad de varias unidades, vive en una y alquila el resto, pueden reducir sustancialmente su inversión inicial. Y si es usted realmente espabilado, puede probar el método BRRRR: comprar, renovar, alquilar, refinanciar y repetir el proceso.

Cuando se trata de encontrar la propiedad adecuada, probablemente habrá oído a la gente decir ubicación, ubicación, ubicación. Pero, en realidad, todo se reduce a una combinación de factores: el potencial de crecimiento del barrio, el tipo de propiedad y su precio. Diversifique sus métodos de búsqueda. Aparte de los listados convencionales, considere las ejecuciones hipotecarias, las subastas y el contacto directo con los propietarios de viviendas vacías. Al evaluar las propiedades, apóyese en la regla del 1% como guía aproximada: lo ideal sería que una propiedad con un precio de 100.000 dólares alcanzara unos 1.000 dólares de alquiler mensual.

Por supuesto, poseer la propiedad es sólo el principio. Llenarla de inquilinos responsables es su siguiente tarea. Realice comprobaciones exhaustivas, incluidas las de crédito y antecedentes. Si el aspecto de la gestión “hágalo usted mismo” le resulta abrumador o le lleva mucho tiempo, considere la posibilidad de contratar a un administrador de propiedades profesional.

Por último, considere lo siguiente: comprar una sola propiedad de alquiler al año y pagarla en 15 años puede construir un imperio de ingresos pasivos. Visualícelo: dentro de 20 años, esos tintineos mensuales en su teléfono podrían ser sustanciales, todo gracias a un enfoque reflexivo y disciplinado de la propiedad inmobiliaria.

Elaborando el sueño del café: Su viaje hacia los ingresos pasivos

Volvamos a ese café parisino de la introducción. Está sorbiendo un espresso y no tiene compromisos urgentes. Este sueño aparentemente esquivo puede ser su realidad con los flujos de ingresos pasivos adecuados. No se trata sólo del dinero; se trata del estilo de vida y la satisfacción que esos flujos pueden ofrecerle, cuando lo reúne todo.

Empecemos por pintar su sueño. ¿Qué aspecto tiene un día ideal cuando el dinero no sostiene el pincel? Tal vez sea ese café en París, o quizás sea el voluntariado en su comunidad, o dedicarse a aficiones que antes el tiempo no le permitía. Si sueña con ampliar sus viajes, debe asegurarse de tener en cuenta estos deseos en su presupuesto.

Pero para convertir esta visión en realidad, primero necesita tener clara su situación financiera actual. Comprenda sus gastos mensuales. ¿Desea trasladarse o dedicarse a una nueva afición? Tenga en cuenta esos gastos. ¿No acaba de imaginarse la vida después de la jubilación? Profundice en las pasiones y causas que resuenen con usted.

A continuación, estudie cómo iniciar ese primer flujo de ingresos pasivos. Empiece por examinar a qué dedica sus horas diarias. Richards descubrió que malgastaba tres horas diarias en actividades triviales como la televisión. ¡Podría descubrir bolsas de tiempo que no sabía que existían! En cuanto a los fondos, considere sacrificios a corto plazo como renunciar a una cena elegante o a ese servicio de streaming adicional. Plantee todas las posibles vías de ingresos pasivos, pero sea exigente: elimine las que no se ajusten a sus habilidades o a sus recursos actuales. Escribir era el punto fuerte de Richards, así que publicar un libro era una clara opción. Considere sus prioridades; si la autonomía total es su objetivo final, sitúe la pasividad en primer lugar.

Sin embargo, el camino hacia el establecimiento de unos ingresos pasivos no está exento de obstáculos. A menudo, la gente tropieza con sus propias creencias limitantes. Sea cual sea el camino de los ingresos pasivos, siempre habrá dudas sobre uno mismo; el miedo a la escasez de habilidades o los posibles fracasos son barreras comunes. Pero aquí está la cosa: la mayoría de estas creencias se desmoronan bajo escrutinio. Digamos que tiene aprensión inicial a invertir. Siempre es posible empezar poco a poco, arriesgando sólo 600 dólares, por ejemplo, y aumentando su confianza a partir de ahí.

El camino hacia los ingresos pasivos exige dedicación, esfuerzo constante y paciencia. Es fácil desanimarse, pero recuerde para qué lo está haciendo. Ya sea ese sueño de tomar un café en París o de pasar tiempo de calidad con sus seres queridos, mantenga su visión en primer plano. Y no se apresure a decir adiós a su trabajo; asegúrese primero de que sus flujos pueden sostener su estilo de vida.

Generar ingresos pasivos no es un paseo por el parque, pero ¡oh, los lugares a los que puede llevarle! Abrace las posibilidades, trace su rumbo y embárquese en el viaje transformador de soñar a hacer. ¿Y quién sabe? Quizá pronto le encontremos en ese café parisino, deleitándose con la vida que ha forjado.

Revisor de hechos: Heaney

Reducción de los gastos de jubilación

En 2014, se esperaba que el 74% de estas personas estén vivas en 2030, lo que pone de manifiesto que la mayoría de ellas vivirán muchos años más allá de la jubilación.Entre las Líneas En el año 2000, 1 de cada 14 personas tenía 65 años o más. Para el año 2050, se prevé que más de 1 de cada 6 personas tenga al menos 65 años. Las siguientes estadísticas ponen de relieve la importancia de una estrategia de jubilación bien planificada para estas personas:

• El 87% de los trabajadores no se siente muy seguro de tener suficiente dinero para jubilarse cómodamente.
• El 80% de los jubilados no se siente muy seguro de mantener la seguridad financiera durante el resto de su vida.
• El 49% de los trabajadores mayores de 55 años tiene menos de 50.000 dólares de ahorros.
• El 25% de los trabajadores no ha ahorrado nada para la jubilación.
• El 35% de los trabajadores no está ahorrando actualmente para su jubilación.
• El 56% de los trabajadores no ha intentado calcular sus necesidades de ingresos en la jubilación.

Posponer la jubilación

Las personas tienden a controlar mucho más su edad de jubilación que sus tasas de ahorro, el rendimiento de sus activos o sus gastos. Por ello, posponer la jubilación puede ser una opción atractiva para las personas que buscan mejorar su preparación para la jubilación o recuperarse de las pérdidas de inversión. El impacto relativo que puede tener el retraso de la jubilación en el gasto de jubilación de una persona depende de las circunstancias específicas, pero las investigaciones han demostrado que retrasar la jubilación de los 62 a los 66 años puede aumentar los ingresos de jubilación de un trabajador medio en un 33%.

Posponer la jubilación minimiza la probabilidad de quedarse sin ahorros para la jubilación de varias maneras:

• Se obtienen rendimientos adicionales de los ahorros que, de otro modo, se pagarían como ingresos de jubilación.
• Los ahorros adicionales se acumulan a partir de un período de trabajo asalariado más largo.
• Se acorta el periodo posterior a la jubilación.
• Aumenta el valor de otras fuentes de ingresos para la jubilación (Seguridad Social, planes de aportación definida, planes de pensiones de prestación definida).

Los estudios demuestran que casi la mitad de los trabajadores prevén retrasar su jubilación porque han acumulado menos activos de jubilación de los que habían previsto.

Autor: Henry

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Recursos

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Véase También

Planificación de la Jubliación
Planes de Jubilación

Ciencia actuarial, Inversión, Jubilación, Cuentas individuales de jubilación, Ahorro, Economía Laboral,
Dinero, Economía, Estafas en Línea, Finanzas Personales, Fraude en Internet, In, Internacionalización, Internet Popular, Inversiones, Muy Popular, Negocios

Después de no haber tomado medidas significativas durante más de dos décadas, el Congreso está mostrando un renovado interés en el tema, y un puñado de proyectos de ley se están abriendo camino en el proceso legislativo.

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