Importancia de la Salud Pública
La comprensión contemporánea de la salud pública concibe un campo cuya amplitud se extiende por encima de las divisiones políticas y trasciende las fronteras sociales y jurisdiccionales. Conceptualmente, la salud pública no se limita a un sector o disciplina. Más bien impregna las actividades gubernamentales y las responsabilidades sociales […]. Implica responder a las enfermedades y prevenirlas, garantizar una infraestructura sólida que proporcione un entorno sanitario y comprender y abordar los determinantes sociales de la mala salud. La forma en que estas ideas pueden llegar a desgranarse -como una cuestión de filosofía práctica o aplicada dentro de las tradiciones liberales angloamericanas- da lugar a lo que puede denominarse críticas «libertarias» y «jurisdiccionales». La primera de ellas se refiere a los argumentos normativos sobre los asuntos legítimos del gobierno: los desafíos de quienes sostienen que la salud se trata adecuadamente (al menos en su mayor parte) como un asunto privado o personal y, por tanto, como una cuestión de responsabilidad individual y no compartida. La segunda se centra en la amplitud y las ambiciones de la salud pública cuando se extiende a todos los sectores y a todas las políticas: esta postura afirma, por motivos esencialmente pragmáticos, que como cuestión de competencia gubernamental, la salud pública sólo debería ser competencia de un departamento contenido y designado en lugar de algo más omnipresente.