Calvinismo

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Calvinismo en relación con las Religiones y los Grupos Religiosos

Calvinismo, teología cristiana del reformador de la Iglesia Juan Calvino. El trabajo de Calvino Institutio christianae religionis (Institución de la religión cristiana, 1536-1559) fue el que tuvo mayor influencia en el desarrollo de las iglesias protestantes de la tradición reformada.

La doctrina calvinista se basa en la tradición teológica paulina y agustiniana. Dentro de sus dogmas más importantes se incluye la creencia en la soberanía absoluta de Dios y la doctrina de la justificación solo por medio de la fe. Lo mismo que el reformador religioso alemán Martín Lutero, Calvino rechazaba el hecho de que los seres humanos fueran capaces de gozar del libre albedrío después de la caída de Adán, pero Calvino llegó incluso más allá de Lutero en la elaboración de una doctrina de la predestinación (algunas personas han sido elegidas por Dios para salvarse, mientras que otras son rechazadas por Él y están destinadas sin remedio a sufrir la condenación eterna). Calvino también compartía la idea de Lutero de que la Biblia constituía la única norma para una vida de fe, aunque no estaba de acuerdo con Lutero en la defensa que éste hacía del sometimiento del Estado a la Iglesia, como tampoco en su teología sobre la Eucaristía. Muchos de los principios del calvinismo tuvieron fuertes implicaciones sociales, en particular el que señala que la economía, la industria y el trabajo penoso forman parte de la virtud moral, y que el éxito en los negocios es una evidencia de la gracia divina. Como estas teorías ayudaban a crear un clima muy apropiado para el comercio, Calvino jugó un papel trascendental en la transición del feudalismo a la implantación del capitalismo.

A comienzos del siglo XVII, en muchos lugares el calvinismo había sido adoptado por grupos protestantes. El Sínodo de Dort, en Holanda (Países Bajos) (1618-1619), acomodó estas formas de pensar a su sistema, creando así la ortodoxia holandesa (véase Arminianismo). Los calvinistas franceses fundaron el movimiento hugonote, perseguido por la iglesia católica apostólica romana.Entre las Líneas En Inglaterra se desarrolló el puritanismo, y muy pronto logró tener una fuerte influencia, en especial durante la dictadura de Oliver Cromwell. La confesión de Westminster (1646) representa la expresión sistematizada de la teología puritana.Entre las Líneas En 1648, el calvinismo fue adoptado por la iglesia de Escocia, convirtiéndose en el credo básico del presbiterianismo tanto de Gran Bretaña como del resto del mundo. Muchos puritanos ingleses, insatisfechos con las políticas de la iglesia anglicana, emigraron a Estados Unidos durante la época colonial.

El calvinismo sigue siendo una rama importante dentro del pensamiento protestante. Durante el siglo XX, el influyente teólogo suizo Karl Barth puso gran énfasis en la doctrina calvinista referente a la soberanía de Dios, que minimiza la importancia de cualquier actividad humana.[1]

Religión y Política

• Anticlericalismo
• Budismo
• Calvinismo
• Confucianismo
• Hinduismo
• Judaísmo
• Reforma Religiosa
• Contrarreforma
• Sintoísmo
• Taoísmo

Aspectos Tradicionales del Calvinismo

Como un sistema teológico y un marco para la doctrina de la iglesia, el Calvinismo es sobre todo una tradición espiritual. Trazando sus raíces a los escritos y enseñanzas de Juan Calvino (1509-1564), la tradición calvinista se concibe como fiel a las escrituras cristianas, siempre buscando iluminar la manera en que el Dios divino inicia y mantiene una comunidad relación con la creación humana.

El Calvinismo es esencialmente una teología de la redención. (Tal vez sea de interés más investigación sobre el concepto). La caída de la humanidad ha necesitado la intervención de Dios. Esto se logra con la revelación continua de la voluntad de Dios a través de la presencia mediadora del Espíritu Santo. El vínculo entre Dios y la humanidad, que se manifestó por primera vez en el nacimiento, la muerte y la resurrección de Cristo, continúa siendo revelado mientras el Espíritu Santo trabaja a través de la iglesia institucional. Así Dios es el iniciador de la creación; Dios ha proporcionado los medios para la redención Suprema; el Espíritu Santo revela la voluntad de Dios a través de la enseñanza inspirada de la iglesia.

El Calvinismo se observa a menudo como la tradición que enseña la doctrina de la predestinación (doble). Esto es, Dios ha preordenado a aquellos que heredarán la vida eterna y, de forma derivada, a aquellos que serán eternamente condenados; por lo tanto, las acciones humanas no son consecuencia soteriológica.

Puntualización

Sin embargo, el mismo Calvin articuló este principio no como una doctrina o incluso inspiró la interpretación bíblica; más bien, entender la salvación como la obra de Dios y la obra de Dios por sí sola es una respuesta humana a una comprensión fiel de la Providencia y el poder de Dios.

Max Weber (1864-1920) se apropia del concepto de predestinación para explicar el surgimiento del capitalismo como sistema económico. Porque nadie sabe exactamente quién será salvado, uno puede mirar solamente a las condiciones temporales como evidencia del favor de Dios. Así, la respuesta más fiel a la vida que se le da es cuidar prudentemente los recursos de uno y trabajar diligentemente para mostrar más evidencia de humildad y sobriedad. Si uno acumula riqueza y bienes en el proceso de manejo cuidadoso de los recursos terrenales, uno puede vivir con más esperanza-y por lo tanto más fielmente. Randall Collins (1996) escribe:

“Si uno hace esto, convertir la vida de uno en un llamamiento, restringiendo cualquier impulso al placer frívolo, uno viene a experimentar un sentimiento de seguridad de que uno es un miembro de los elegidos. El estilo de vida puritano, asceta surge así como una respuesta a la doctrina de la predestinación. (Tal vez sea de interés más investigación sobre el concepto). Sus efectos, a su vez, son traer la actividad económica mundana bajo control religioso y aprovechar la motivación religiosa para un nuevo espíritu de capitalismo.”

Weber argumenta, finalmente, que la ética protestante surge de una interpretación espiritual de la relación entre Dios y la humanidad. Luego produce un “espíritu” cultural que valora, promueve y, en última instancia, reproduce el capitalismo racional.

En términos muy generales, los puritanos americanos eran calvinistas, si solo porque llevaban una comprensión calvinista de la relación entre Dios y la humanidad, y adoptaron una cosmovisión similar a la de Calvin.

Puntualización

Sin embargo, a comienzos del siglo XVII, el pensamiento calvinista había sido refinado y especificado por teólogos holandeses y escoceses. Para cuando los principios calvinistas se apropiaban en la Iglesia Congregacional, la voluntad humana y el comportamiento humano fueron inyectados en el proceso por el cual Dios decidió quién sería salvado. La doctrina puritana de la salvación fue centrada en Dios, pero las buenas obras humanas lo hicieron realidad.

La tradición calvinista continúa en la Iglesia Presbiteriana moderna, cuyas características distintivas son la “conexión” congregacional y una forma racional y representativa del gobierno de la iglesia.

Observación

Además de los institutos épicos, estableciendo la espiritualidad de Calvin y la teología doctrinal, sus ordenanzas eclesiásticas establecen la organización de la iglesia y son las raíces de las cuales el libro presbiteriano de orden ha emergido.

Autor: Henry Davis

Calvinismo en el Siglo XVII

Nota: consulte también el Calvinismo en los orígenes religiosos de la Ilustración, más abajo.

La relación entre el arminianismo y el calvinismo se vuelve mucho más clara una vez se distingue entre las doctrinas intolerantes, predestinaristas, escolásticas del clero calvinista y el racionalismo tolerante y escéptico de los erasmianos. El arminianismo no es una herejía calvinista. Inherentemente, no tiene nada que ver con el calvinismo. Solo se conecta accidentalmente con Arminius. Esencialmente es un movimiento independiente que precede al calvinismo. Su aparente surgimiento del calvinismo en Holanda, Suiza, Escocia, su aparición como un movimiento en la Iglesia Anglicana en oposición al calvinismo del clero isabelino, es de hecho simplemente la afirmación de la independencia por una tradición anterior que se había fusionado temporalmente en el Calvinismo.

Se había fusionado bajo la presión de la política. [rtbs name=”introduccion-a-la-politica”]La misma coyuntura política que había obligado primero a los erasmianos humanistas a unirse a la Iglesia calvinista debía repetirse una y otra vez. Era recurrente en la década de 1580, cuando la amenaza de la conquista española sobre Holanda (Países Bajos) y los erasmianos de Holanda, en defensa propia, cedería a los Predikants calvinistas a quienes muchos de ellos odiaban. Al mismo tiempo, bajo la misma amenaza, el clero calvinista inglés se convertiría, por un tiempo, en articulador de la resistencia inglesa y, en esa coyuntura afortunada, intentaría imponer su liderazgo (véase también carisma) en la Iglesia. Esta fue la época de los tratados de Marprelate y del intento de John Field de tomar el control de la Iglesia de Inglaterra desde dentro.Entre las Líneas En ambos países, Inglaterra y Holanda, los calvinistas estarían protegidos por ese aventurero político sin escrúpulos [208], el Conde de Leicester, quien de hecho era el patrocinador de los “protestantes radicales” en todas partes, pero no necesariamente, por lo tanto, de ideas originales. La misma amenaza crearía una alianza similar en Francia; pero allí, el hecho de la guerra civil y el buen equilibrio de fuerzas permitirían a muchos de los humanistas preservar una posición intermedia entre las Iglesias. Los que en Inglaterra y Holanda (Países Bajos) eran liberales dentro del redil calvinista, en Francia podían ser hugonotes, pero también podían ser políticos católicos.Entre las Líneas En cualquier caso, su lealtad a su partido religioso era condicional. Cuando se eliminara el peligro externo, afirmarían su independencia.

A finales del siglo xvi se eliminó ese peligro. Para 1600, el primer asalto de la Contrarreforma había sido resistido con éxito, y los Erasmianos ya no necesitaban sumergir su identidad dentro de un partido disciplinado. Así que volvieron a emerger.Si, Pero: Pero como una vez estuvieron sumergidos, reaparecieron con una diferencia, al menos de nombre. Su identidad continua había sido olvidada y tomaron, o recibieron, los nombres de sus nuevos líderes. Arminio en Holanda (Países Bajos) parecía un hereje dentro de la Iglesia calvinista, aunque en realidad lo hizo, pero reafirmó las antiguas doctrinas de Erasmo. Fausto Sozzini, a través del cual la teología “racional” regresó a Europa occidental, parecía el fundador de una nueva secta “polaca”, aunque en realidad repitió las ideas de los discípulos suizos e italianos de Erasmus, desplazados por una generación; y como esa secta se dio a conocer en Holanda (Países Bajos) y desconcertó al clero de la Iglesia calvinista establecida, también parecía ser una herejía calvinista. Así, el socinianismo fue descrito como un movimiento “protestante radical”, en la “extrema izquierda” del protestantismo.Si, Pero: Pero estos términos no tienen sentido. O al menos, si tienen significado, es solo si admitimos que el calvinismo en sí fue un movimiento reaccionario, un renacimiento de la teología escolástica, la historia providencial y la ciencia aristotélica que Erasmo, Maquiavelo y los platónicos de Florencia habían amenazado con socavar.

Basado en la experiencia de varios autores, mis opiniones y recomendaciones se expresarán a continuación (o en otros lugares de esta plataforma, respecto a las características y el futuro de esta cuestión):

Así comenzó la segunda fase de la Ilustración, la era dorada “jacobea” de Bacon y Grocio: una fase que se interrumpió bruscamente cuando una sociedad tras otra se contrajo ante la amenaza de una guerra ideológica renovada.Entre las Líneas En 1618 llegó a Holanda (Países Bajos) el miedo a la guerra, a la reconquista española y católica, y una vez más los predicadores calvinistas, los propagandistas de la resistencia, afirmaron su poder.

Detalles

Los arminianos fueron aplastados, o reconocieron el mayor peligro y vinieron voluntariamente a atacar.Entre las Líneas En otros países se repitió el mismo patrón, con variaciones locales. Si Grocio fue encarcelado en Holanda (Países Bajos) calvinista, Bacon [209] se purificó póstumamente en Inglaterra.

Informaciones

Los defensores de los orígenes puritanos de la ciencia lo puritizarían todavía. No fue hasta el final de las guerras ideológicas de Europa, es decir, hasta la década de 1650, que las ideas racionales y liberales pudieron comenzar a emanciparse, una vez más, de su alianza con el calvinismo: esa alianza opresiva que la necesidad política les había impuesto. para escapar del clericalismo aún más opresivo de la Contrarreforma.

Autor: Williams

Calvinismo en los orígenes religiosos de la Ilustración (movimiento intelectual del siglo XVIII, que también recibe el nombre de Siglo de las Luces; véase sus características) en el Siglo XVII

Cuando miramos los orígenes religiosos de la Ilustración, no los descubrimos en ninguna Iglesia o secta. Se encuentran en ambas iglesias y en varias sectas. Lo que es común a los hombres que expresan tales ideas es que todos ellos son, en cierto sentido, heréticos: es decir, o pertenecen a grupos disidentes dentro de sus Iglesias o son considerados no ortodoxos.

Más Información

Las iglesias ortodoxas (católica, luterana, anglicana, calvinista) los miran con recelo.42 Además, la tradición herética que comparten no solo es independiente de la Reforma de la que a menudo se supone que surgió. Precede a la Reforma; y la Reforma, aunque puede haberla liberado al principio, pronto se ha convertido en un movimiento represivo, fragmentándolo y obstruyéndolo positivamente. La tradición intelectual del escepticismo, el misticismo, la literatura académica crítica, la razón laica, el libre albedrío, que se unió en Erasmo, se rompió y se hizo clandestina por las luchas ideológicas de los siglos XVI y XVII. Lo que antes había sido un movimiento general dentro de una sociedad unida, aceptable en los tribunales de los príncipes y en las catedrales de la Iglesia establecida, se convirtió, bajo el impacto de sucesivas luchas ideológicas, en una serie de herejías separadas, etiquetadas con nombres sectarios e igualmente condenadas. Por todos los miembros de derecho de los diversos establecimientos religiosos.Entre las Líneas En tiempos de paz ideológica, las mentes olímpicas como las de Grotius o de Thou o Bacon buscarían reunir estas ideas, devolverles su respetabilidad original y desarrollarlas aún más. Una vez más, los príncipes y el clero superior los escucharían.Si, Pero: Pero el regreso de la guerra religiosa dio poder a los radicales de la ortodoxia; a los calvinistas que condenaron a Grocio en Holanda, a los frailes que condenaron a Galileo en Italia. El movimiento que podría haberse reunido se dividió una vez más: lo que podría haber sido la ortodoxia de una sociedad unida se convirtió nuevamente en las herejías de las Iglesias divididas. La Ilustración (movimiento intelectual del siglo XVIII, que también recibe el nombre de Siglo de las Luces; véase sus características) del siglo XVIII, cuando llegara, sería una reunión de todos los herejes, la reintegración de un movimiento que la revolución religiosa había detenido y transformado, pero que no podía destruir.

Y sin embargo, cuando hemos dicho esto, no hemos dicho todo. El fantasma del calvinismo no puede ser exorcizado tan fácilmente. Porque si el calvinismo era intelectualmente retrógrado y represivo, un enemigo positivo y vengativo de la iluminación, políticamente, sin embargo, realizó un servicio esencial. No es suficiente decir que la Ilustración (movimiento intelectual del siglo XVIII, que también recibe el nombre de Siglo de las Luces; véase sus características) habría llegado antes si no hubiera habido una guerra ideológica en los siglos xvi y xvn. El hecho es que hubo tal guerra; y una vez que aceptamos [216] ese hecho, debemos admitir que el calvinismo desempeñó un papel importante, quizás vital, en él. Dio a Holanda (Países Bajos) la fuerza espiritual que transformó una resistencia aristocrática en una revolución nacional y creó un nuevo fenómeno político en Europa. Le otorgó a Escocia el poder de afirmar y preservar su identidad nacional. Dio a la ciudad de Ginebra el poder de resistir enemigos codiciosos. Sin esa resistencia, la Contrarreforma podría haber triunfado en Europa, y aunque podemos admitir que la tradición erasmiana sobrevivió incluso bajo el peso del nuevo catolicismo, también debemos admitir que su supervivencia fue muy precaria y que sin la resistencia Y ejemplo de la Europa protestante, podría haberse extinguido. Ciertamente esta fue la visión de los contemporáneos. No podemos pasar por alto la visión general de los humanistas de mediados del siglo XVI a quienes la elección parecía ser una entrega total del intelecto al catolicismo o una simple entrega parcial al calvinismo. La disciplina del calvinismo podría verse como la disciplina temporal de la guerra necesaria; el de catolicismo contrarreforma parecía ser la disciplina permanente de un estado policial. Y ciertamente fue en las sociedades en las que la Contrarreforma no había triunfado que la independencia intelectual se reanudó lo más pronto posible.

Esta convicción de los contemporáneos de que el calvinismo, aunque intelectualmente reaccionario, era el aliado político necesario para el progreso intelectual se muestra más claramente en la actitud de los precursores católicos romanos de la Ilustración. (Tal vez sea de interés más investigación sobre el concepto). Jacques-Auguste de Thou fue un buen católico que vivió y murió en la profesión de su fe.Si, Pero: Pero también, como observó continuamente, estaba dedicado a la verdad histórica, e históricamente veía a los hugonotes como los defensores de la reforma y el progreso de Erasmo. Por esto fue denunciado en roma. Para evitar la condena, adoptó todos los dispositivos, todos los compromisos, todas las concesiones, excepto el único que le habría servido. Se negó a retractarse de sus opiniones.Entre las Líneas En consecuencia fue condenado. El drama de la larga batalla de De Thou con Roma, todo el tenor de su Historia, una historia “protestante” de un escritor católico, y la evidencia de su correspondencia con sus amigos íntimos en el partido calvinista: Jerome Groslot de Lisle, cuyo padre había perecido en la masacre de San Bartolomé; Isaac Casaubon, que había huido a Inglaterra para escapar de los conversistas; Georg Michael Lingelsheim, tutor y consejero del Calvinista Conde Palatino, todo esto demuestra que, para De Thou, incluso la iluminación católica dependía de la ayuda de la resistencia calvinista.

Aún más vívida es la evidencia del gran contemporáneo de De Thou, Paolo Sarpi: el fraile católico que dirigió la resistencia intelectual de Europa, y la resistencia política de Venecia, contra la agresión de la Contrarreforma. La vida entera de Sarpi lo convirtió en un aliado del mundo protestante, y aquí no hay necesidad de documentar los detalles de su alianza con él.Si, Pero: Pero un hecho merece una mención especial. Poco después del Sínodo de Dordt, Sarpi escribió al erudito y poeta holandés Daniel Heinsius declarando su propia posición en las controversias religiosas de Holanda. Esa posición, a primera vista, nos sorprende. Porque Sarpi dio su apoyo no, como deberíamos esperar, a los arminianos, el partido de calvinistas liberales que eran los aliados naturales de los católicos liberales, sino a los contra-remonstrantes, los calvinistas extremos, los perseguidores de Grocio, los fanáticos de la predestinación.. Sobre bases meramente intelectuales, esta acción es ininteligible. Asume importancia solo si lo vemos desde un punto de vista político.Entre las Líneas En vísperas de una guerra ideológica renovada, el más grande historiador católico reconoció que los calvinistas extremos, el partido de la resistencia incondicional e intransigente, eran los aliados esenciales de todos aquellos católicos que procuraban preservar la libertad intelectual casi sofocada por el Concilio de Trento.

Políticamente, por lo tanto, el calvinismo puede haber sido necesario para el progreso intelectual de Europa en el siglo XVII. Podemos conceder esto, al igual que podemos conceder que políticamente el partido Whig fue necesario para garantizar la libertad inglesa en el mismo siglo.Si, Pero: Pero hay una diferencia entre la verdad política y la intelectual. El hecho de que la resistencia Whig rompiera el despotismo de Stuart no significa tampoco que las teorías Whig de la constitución y de la libertad fueran intelectualmente correctas o incluso, en sí mismas, progresistas. Tampoco significa que tales teorías, por sí mismas, acarrearan las consecuencias que siguieron a la victoria del partido que las profesaba. Del mismo modo, el hecho de que la resistencia calvinista fuera necesaria para la continuación y el desarrollo de una tradición intelectual no implica ninguna conexión directa o lógica entre ellos. Un filósofo, en un momento de crisis, puede tener que ponerse una armadura. A esa armadura le debe su vida y su capacidad para seguir filosofando.Si, Pero: Pero eso no convierte a la armadura en la fuente de su filosofía.[sc name=”filosofia”][/sc]De hecho, mientras se usa, puede impedir la libre especulación, que se puede reanudar solo cuando finaliza la batalla y se aplaza. La virtud del calvinismo, con respecto a [218] la Ilustración, tal vez pueda reducirse a esto. Como traje de armadura, resultó ser útil en la batalla y, aunque era más incómodo de usar, resultó más fácil de desechar que el arcaico, el correo en cadena con incrustaciones ornamentales que protegía, pero también sofocaba a los filósofos de la Iglesia rival.

Autor: Williams

Definición de Calvinismo en Ciencias Sociales

[rtbs name=”home-ciencias-sociales”]Una doctrina cristiana asociada a Juan Calvino (1509-1564). El calvinismo es importante para los sociólogos como un componente de la ética protestante, un conjunto de ideas sociales y religiosas consideradas favorables al desarrollo del capitalismo. Véase también: ÉTICA PROTESTANTE. (En general, aplicable a Canadá)

Revisor: Lawrence

Recursos

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Traducción al Inglés

Traducción al inglés de Calvinismo: Calvinism

Véase También

Bibliografía

• Información acerca de “Calvinismo” en el Diccionario de Ciencias Sociales, de Jean-Francois Dortier, Editorial Popular S.A.

Recursos

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Notas y Referencias

1. Basado en la información sobre calvinismo de la Enciclopedia Encarta

Véase También

Presbyterianism, tesis protestante de la ética, Weber máximo

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