Derecho del Trabajo Social

Este elemento es una expansión del contenido de los cursos y guías de Lawi. Ofrece hechos, comentarios y análisis sobre el “Derecho del Trabajo Social”.

Visualización Jerárquica de Trabajo Social

Medio Ambiente > Medio natural > Vida silvestre > Ayuda social
Medio Ambiente > Medio natural > Vida silvestre > Política social > Trabajador social

Visualización Jerárquica de Trabajador Social

Asuntos Sociales > Vida social > Política social
Asuntos Sociales > Protección social > Ayuda social > Servicio social
Asuntos Sociales > Protección social > Ayuda social > Trabajo social

Derecho del Trabajo Social

El derecho del trabajo social es un término general que se refiere a los aspectos legales de la práctica del trabajo social, como comprender la relación general entre el sistema de justicia y el trabajo social, tener un conocimiento práctico de las leyes y los organismos reguladores que afectan a la propia área particular del trabajo social y estar preparado para actuar como testigo en casos judiciales.

Nota: Respecto al trabajo social en México, véase aquí. En cuanto al trabajo social en Estados Unidos, éste puede ser un buen punto de origen de la investigación (social work). Y, en general, hay un texto dedicado al trabajo social en Canadá y a Norteamérica en general.

Descripción

Dado que muchos trabajadores sociales están empleados por agencias gubernamentales estatales o locales, necesitan conocer el alcance de sus poderes y obligaciones. Además, el rápido aumento de las demandas por mala praxis contra trabajadores sociales desde la década de 1980 significa que los trabajadores sociales necesitan informarse sobre sus riesgos legales. Además, los trabajadores sociales están sujetos a varios conjuntos de normas o códigos deontológicos que pueden entrar en conflicto en varios puntos con el derecho civil o penal de su jurisdicción específica.

Estos otros conjuntos de normas pueden incluir:

• requisitos disciplinarios y de licencia profesional
• códigos deontológicos como el código revisado por la Asociación Nacional de Trabajadores Sociales (NASW) en 1999
• normativas y políticas establecidas por la agencia que emplea al trabajador social
  normas culturales o comunitarias locales de atención
• el propio sentido de la profesionalidad del trabajador social.

El término “derecho del trabajo social” también se aplica a las normas legales que rigen la formación y la certificación de los trabajadores sociales. En el Reino Unido, por ejemplo, el título de “trabajador social” se definió por ley en abril de 2005. Sólo pueden utilizarlo las personas que hayan cumplido ciertos requisitos educativos y estén registradas en el Consejo General de Asistencia Social (en Inglaterra) o en sus homólogos de Escocia, Gales o Irlanda del Norte.

En Estados Unidos, la regulación legal del trabajo social (al igual que la medicina, la odontología y otras profesiones sanitarias) está delegada por la Constitución en cada uno de los estados. En la mayoría de los estados, el poder legislativo establece un consejo de trabajo social y le otorga los poderes necesarios para definir la práctica del trabajo social, determinar las cualificaciones necesarias y otorgar licencias a los profesionales. En unos pocos estados, un departamento que supervisa varios consejos consultivos administra la ley de práctica y otras leyes pertinentes. Sin embargo, incluso una breve lectura de las definiciones de trabajo social obtenidas de los 50 estados y las 10 provincias canadienses por la Asociación de Consejos de Trabajo Social (ASWB) indica una considerable variedad en cuanto a extensión, especificidad y áreas de énfasis. Además, la creciente división del trabajo social en especialidades como la psicoterapia y el asesoramiento, la intervención en crisis familiares, las cuestiones relacionadas con el envejecimiento, los programas de asistencia a los empleados, la planificación de políticas y la investigación, la defensa y la organización comunitaria, los programas escolares y educativos, la asistencia a los refugiados y muchas otras, complica cualquier debate sobre el derecho del trabajo social.

Historia

El trabajo social ha estado implicado en el sistema jurídico de Estados Unidos durante casi un siglo y medio. Sin embargo, a diferencia de la medicina, el trabajo social es una profesión relativamente nueva; no fue reconocida como una vocación separada hasta principios del siglo XX. El trabajo social comenzó alrededor de la época de la Guerra Civil como una forma de alcance misionero urbano por parte de las principales iglesias protestantes. A medida que las grandes ciudades de Estados Unidos crecían a expensas de las zonas rurales y que millones de nuevos inmigrantes procedentes de Europa y Asia entraban en el país, surgió una gran necesidad de asistencia práctica para ayudar a estos nuevos estadounidenses a encontrar trabajo, educar a sus hijos y obtener una vivienda satisfactoria. Gran parte de esta labor de socorro inicial fue realizada por voluntarios. La Comisión de Sanidad y la Oficina de Liberados (Freedmen’s Bureau), organismos gubernamentales que se crearon durante la Guerra Civil para proporcionar medidas de salud pública y ayudar a los antiguos esclavos, también fueron precursores del trabajo social moderno. Además, en la década de 1860 se crearon las primeras instituciones estatales para huérfanos, pobres y enfermos mentales.

▷ En este Día de 11 Mayo (330): Constantino establece la Nueva Roma, Constantinopla

En este día del año 330, Constantino I consagró la ciudad de Bizancio (Constantinopla, en su honor; actual Estambul) como nueva capital del Imperio Romano de Oriente, un acto que contribuyó a transformarla en una de las principales ciudades del mundo. El no sería, sin embargo, el principal emperador de Bizancio.

En la década de 1890, era obvio que las diversas formas de trabajo de socorro y bienestar social debían llevarse a cabo sobre una base sistemática y “científica”. Los “visitantes amistosos” voluntarios, como se les había llamado, fueron sustituidos gradualmente por trabajadores sociales asalariados que se veían a sí mismos como profesionales imparciales y objetivos. El propio término “trabajador social” se utilizó por primera vez en la década de 1890. Las primeras trabajadoras sociales profesionales -la mayoría de las cuales eran mujeres con estudios universitarios que tenían pocas oportunidades de utilizar sus títulos- asistían a programas de formación para mejorar sus habilidades en el trabajo social. Hacia 1900, el trabajo social comenzó a expandirse hacia los campos del bienestar infantil y el sistema de justicia juvenil. Las trabajadoras sociales también se involucraron en el sistema legal a través de su implicación en la política local con el fin de mejorar las vidas de sus clientes. Estas experiencias convencieron a muchos de que era tan importante cambiar las estructuras de la sociedad como ayudar a los individuos.

Tras la Primera Guerra Mundial (1914-1918), los trabajadores sociales empezaron a especializarse, creando nuevos campos como el trabajo social médico, el trabajo social psiquiátrico y el trabajo social escolar. La psiquiatría, en particular, se convirtió en una gran área de especialización; en 2005 había más trabajadores sociales licenciados como proveedores de atención sanitaria mental en Estados Unidos que psiquiatras, psicólogos y enfermeras psiquiátricas juntos; y el 40% de los trabajadores sociales enumeran actualmente la atención sanitaria mental como su principal campo de práctica. Las primeras organizaciones profesionales de trabajadores sociales se formaron durante este periodo; la Conferencia Nacional de Trabajadores Sociales vio la luz en 1917. Los colegios y universidades empezaron a ofrecer cursos para preparar a los estudiantes como trabajadores sociales; la primera escuela de posgrado de trabajo social se fundó en la Universidad de Chicago en 1920.

La Gran Depresión de los años 30 y el New Deal llevaron finalmente el trabajo social a la esfera de la política pública. La primera mujer miembro del Gabinete, Frances Perkins, había sido trabajadora social antes de convertirse en Secretaria de Trabajo en 1933. A medida que el alcance de la implicación del gobierno con la salud, la educación y los asuntos sociales seguía ampliándose después de la Segunda Guerra Mundial, los trabajadores sociales participaron en la investigación de políticas públicas, además de trabajar con el sistema de justicia penal a través de servicios para jóvenes, servicios de protección infantil, programas contra la violencia doméstica y el abuso de sustancias, y programas para reclusos. En 1955, siete grupos profesionales de trabajo social se fusionaron para formar la Asociación Nacional de Trabajadores Sociales (NASW), que en la actualidad proporciona formación continua y acreditación a 150.000 trabajadores sociales en Estados Unidos. La asociación afirma que “se enorgullece de participar activamente en la legislación estatal y nacional”. También informa regularmente a sus miembros de los cambios o decisiones legales que puedan afectar a su trabajo.

Responsabilidad profesional

Durante la mayor parte de la historia del trabajo social como profesión, las demandas contra los trabajadores sociales eran poco frecuentes. Su número ha aumentado considerablemente desde mediados de la década de 1980 por varias razones:

• El trabajo social se ha vuelto más especializado. Esta tendencia significa que los clientes esperan de los trabajadores sociales unos niveles más altos de educación, competencia general y habilidades específicas.
• Las legislaturas y los tribunales estatales están aboliendo la inmunidad de responsabilidad que antes protegía a los trabajadores sociales de los organismos públicos. Además, los tribunales y las legislaturas están revisando y ampliando continuamente conceptos como “proteger y advertir”, que amplía la gama de deberes que debe cumplir un trabajador social. El caso Tarasoff de 1976 fue una sentencia especialmente importante porque estableció como deber legal de un trabajador social advertir a las víctimas potenciales de la intención de un cliente de hacerles daño.
• Los clientes están más informados ahora que en el pasado sobre las formas de entablar un litigio por mala praxis o presentar quejas éticas contra un trabajador social. Muchas personas son conscientes, por ejemplo, de que pueden ponerse en contacto con la junta estatal de licencias o con organizaciones profesionales como la NASW, así como presentar cargos civiles o penales contra un trabajador social.
• Cada vez son más los trabajadores sociales que trabajan a cambio de honorarios. Este cambio ha desvirtuado el ideal de “puro servicio” que tendía a desalentar las demandas contra los trabajadores sociales en el pasado.
• La escasez de recursos y las medidas de contención de costes suelen dar lugar a la terminación prematura de los servicios de un trabajador social, lo que puede provocar resentimiento por parte del cliente y una demanda por daños y perjuicios.

El trabajo social tiene un perfil mucho más alto como profesión a principios de la década de 2000 que incluso en el pasado reciente. Una mayor visibilidad y un estatus más elevado conducen a una mayor exigencia de responsabilidades.

Los trabajadores sociales que ejercen en determinados entornos corren un mayor riesgo de ser demandados. Estos tipos de práctica de mayor riesgo incluyen las prácticas de grupo, los entornos de atención gestionada y los servicios de protección infantil. En las prácticas de grupo, todos los miembros del grupo pueden ser considerados responsables de las acciones de un miembro. Los contextos de atención gestionada son de alto riesgo porque las directrices de contención de costes y el sistema de reembolso pueden presionar a un trabajador social para que ponga fin a los servicios prestados a un cliente, que puede entonces demandar si considera que no se ha atendido su interés superior. Por último, los entornos de bienestar infantil conllevan riesgos especiales de responsabilidad, que van desde acusaciones de investigación inadecuada o retirada errónea de un niño hasta una investigación excesivamente intrusiva y la devolución de un niño a unos padres peligrosos. Los trabajadores sociales especializados en bienestar infantil se encuentran con frecuencia en situaciones “sin salida”, atrapados entre las normas y reglamentos de la agencia, el interés superior del niño y los deseos o exigencias de los padres.

▷ Lo último (mayo 2024)

Lo último publicado esta semana de mayo de 2024 en esta plataforma digital:

Mujeres de Bizancio

Mediación

Constantinopla

▷ Noticias internacionales de hoy por nuestros amigos de la vanguardia (nota: en muchas noticias tienen muro de pago):

• La ONU ‘admite’ al Estado palestino
• Israel ordena la evacuación de más zonas del este de Rafah y puntos del norte de la Franja
• Diluvio bíblico en las tierras del bolsonarismo
• “Sabemos lo que nos espera”
• Brasil improvisa un refugio para perros perdidos durante las fuertes lluvias

Existen varias clases diferentes de responsabilidad profesional para los trabajadores sociales en Estados Unidos:

• Mala praxis o negligencia. La mala praxis en derecho se refiere a “cualquier mala conducta profesional, falta irrazonable de habilidad o fidelidad en los deberes profesionales o fiduciarios, malas prácticas o conducta inmoral o ilegal”. La negligencia se refiere al descuido o a la falta de adopción de medidas razonables y prudentes para garantizar que los demás no resulten perjudicados por las propias acciones. Puede incluir la realización de una acción de forma incorrecta (comisión), así como no tomar las medidas adecuadas (omisión). La mala praxis y la negligencia se clasifican como agravios, que son casos civiles que implican actos ilícitos que provocan daños a otra persona o a la propiedad. El derecho de daños abarca tanto los actos intencionados como los no intencionados. Se decide por el derecho común (judicial) y no por el derecho estatutario; es decir, un tribunal civil y no el poder legislativo determina si un acto ilícito implica responsabilidad extracontractual. La mayoría de las acciones por negligencia contra los trabajadores sociales implican negligencia o incumplimiento de las normas profesionales de atención. Según la NASW, entre 1969 y 1995, el 53% de todas las demandas por mala praxis contra trabajadores sociales se presentaron por trato incorrecto, conducta sexual inapropiada, violación de la intimidad o intento de suicidio de un cliente.
• Otras infracciones civiles. Esta categoría incluye acciones legales relacionadas con violaciones de los derechos civiles, violaciones de la intimidad, incumplimientos de la confidencialidad, supervisión incorrecta e incumplimientos contractuales. La supervisión inadecuada abarca los casos en los que un supervisor de prácticas permite a un interno o aprendiz ofrecer asesoramiento a clientes o realizar otros servicios por encima del nivel de competencia y licencia del aprendiz. Un ejemplo de incumplimiento de contrato es una demanda interpuesta por una compañía de seguros contra un trabajador social que había acordado exigir el copago a un cliente y luego no le facturó.
• Responsabilidad penal. En algunos estados, la mala conducta sexual es un delito penal y no civil; otros permiten que se presenten cargos penales además de una demanda por mala praxis. Los casos penales difieren de las demandas civiles en dos aspectos importantes. El primero es que en los casos penales se exige un nivel de prueba más elevado. En una demanda por negligencia u otro tipo de demanda civil, el caso se decide sobre la base de la “preponderancia de las pruebas”, lo que significa que las pruebas presentadas por una de las partes del caso se consideran más creíbles que las presentadas por la otra. En los casos penales, sin embargo, la culpabilidad del acusado debe demostrarse “más allá de toda duda razonable”, que es un criterio mucho más estricto. La segunda gran diferencia es que el seguro de responsabilidad profesional no puede utilizarse para cubrir los costes de defenderse de una acusación penal.
• Infracciones de las normas o reglamentos de concesión de licencias profesionales. Estos reglamentos pueden incluir leyes de protección de títulos, que cubren el uso de títulos profesionales como “trabajador social certificado” o “trabajador social clínico”, leyes de regulación de la práctica, que definen los límites de los servicios y actividades de una profesión, y leyes de registro, que definen quién tiene derecho a ejercer en cada estado. En Estados Unidos, una licencia para ejercer el trabajo social en un estado no es transferible a otro a menos que los dos estados en cuestión tengan un acuerdo de reciprocidad para reconocer mutuamente sus procedimientos de obtención de licencia. En la mayoría de los casos, el trabajador social debe solicitar una nueva licencia si se traslada a otro estado. El ASWB mantiene un registro de trabajo social para facilitar la transferencia de la documentación de la licencia cuando un trabajador social se traslada. El ASWB también mantiene una base de datos de trabajadores sociales que han sido sancionados disciplinariamente, conocida como Sistema de Información de Acciones Disciplinarias o DARS. Desde principios de la década de 2000, 42 de los 50 estados envían informes de acciones disciplinarias al DARS.
• Violaciones éticas. Las violaciones éticas se refieren al incumplimiento de las normas que reflejan los valores u objetivos de la profesión. En el caso del trabajo social, estos valores incluyen ideales como el respeto a todas las personas, el servicio a los demás, la preocupación por la justicia social, el mantenimiento de altos niveles de competencia y similares. En la mayoría de los casos, las normativas estatales simplemente incorporan el código ético reconocido de la profesión y no existen conflictos entre la ley estatal y las normas profesionales. Sin embargo, en los casos de un dilema ético real o potencial, se aconseja al trabajador social que busque el asesoramiento de un abogado. Ejemplos comunes de tales dilemas éticos incluyen dar a un cliente acceso a su historial clínico, decidir si dar por terminado o retener a un cliente que no cumple o que no paga sus honorarios, o retener información potencialmente perjudicial de algunos miembros de una familia a petición de otros.

Reducir el riesgo de litigios

Los trabajadores sociales de principios de la década de 2000 pueden reducir el riesgo de litigio tomando las siguientes precauciones:

Basado en la experiencia de varios autores, mis opiniones y recomendaciones se expresarán a continuación (o en otros lugares de esta plataforma, respecto a las características en 2024 o antes, y el futuro de esta cuestión):

• Mantenga un alto nivel de competencia profesional.
• Documente todas las decisiones e intervenciones profesionales de forma clara y completa.
• Obtenga una cobertura personal de responsabilidad profesional en lugar de asumir que uno estará cubierto por el seguro del empleador.
• Familiarícese con la normativa estatal y local sobre licencias.
• Busque un abogado que conozca la mala praxis, la regulación profesional, la ley de salud mental y la ley de asistencia social, y tenga una consulta inicial con él o ella.
• Relea periódicamente el código ético de la NASW y siga sus recomendaciones.

Otro aspecto de la reducción de riesgos es afrontar eficazmente el estrés personal y evitar el abuso de sustancias. Según varios grupos de investigadores, el estrés marital o emocional es la causa más común de deterioro profesional entre los trabajadores sociales. Sin embargo, los trabajadores sociales también tienen una tasa superior a la media de problemas con el alcohol y las drogas (AOD) en comparación con la población general. Un estudio de 751 trabajadores sociales, todos ellos miembros de la NASW, informó de que el 21% había consumido drogas ilegales desde que se convirtieron en trabajadores sociales, el 28% había tenido episodios de borracheras en el año anterior, el 34% informó de al menos un incidente en su práctica que había ocurrido cuando estaban deteriorados por el consumo de sustancias y el 39% informó de que había trabajado cuando estaba demasiado alterado para llevar a cabo sus tareas con eficacia. Todos ellos son factores de riesgo para cometer un error de juicio que puede desembocar en una demanda civil o penal.

Educación y formación

En el clima jurídico actual, es fundamental que los trabajadores sociales comprendan las áreas de la práctica del trabajo social reguladas por su jurisdicción específica. La mayoría de los estados regulan cuatro áreas de práctica basadas en títulos académicos con o sin cualificaciones adicionales. Son las siguientes:

• licenciatura en trabajo social (BSW) tras la graduación;
• máster en trabajo social (MSW) tras la graduación;
• MSW más dos años de experiencia supervisada de posgrado; y
• MSW con dos años de experiencia de posgrado en trabajo clínico directo.

Algunos estados, sin embargo, sólo regulan una o dos de estas áreas. Sólo unos pocos estados otorgan licencias a los trabajadores sociales con un título de asociado. El ASWB ofrece cinco exámenes de competencia para las diferentes categorías de licencias estatales: Asociado, Licenciatura, Máster, Generalista Avanzado y Clínico. La NASW tiene un Centro de Acreditación que certifica a los candidatos elegibles como Trabajadores Sociales Clínicos Cualificados (QCSW; para clínicos de nivel inicial) o como Diplomados en Trabajo Social Clínico (DCSW; para profesionales privados y clínicos avanzados).

Educación y formación avanzadas

Un número creciente de trabajadores sociales en Estados Unidos y Canadá están obteniendo títulos avanzados en trabajo social propiamente dicho o en un campo estrechamente relacionado. El Departamento de Trabajo de Estados Unidos señaló a principios de 2005 que “aunque una licenciatura [en trabajo social] es el requisito mínimo, un máster… se ha convertido en el estándar para muchos puestos”.

Especialidades certificadas

Además de acreditar a los trabajadores sociales clínicos, la NASW ofrece dos certificaciones de especialidad para los titulares de la BSW y cinco para los titulares de la MSW. Los trabajadores sociales con una licenciatura pueden certificarse como Trabajadores Sociales de Niños, Jóvenes y Familias (C-CYFSW) o como Gestores de Casos de Trabajo Social (C-SWCM). Los que tienen un máster pueden obtener el título de especialista en trabajo social escolar (C-SSWS), gestor avanzado de casos de trabajo social (C-ASWCM), trabajador social clínico especializado en alcohol, tabaco y otras drogas (C-CATODSW), trabajador social sanitario (C-SWHC) o trabajador social avanzado especializado en niños, jóvenes y familias (C-ACYFSW).

Trabajo social forense

Algunos trabajadores sociales optan por especializarse en el trabajo con tribunales civiles o con el sistema de justicia penal. El trabajo social forense se desarrolló dentro de la profesión a finales del siglo XX, cuando se formó la Conferencia Nacional de Instituciones Benéficas y Correccionales (NCCC; uno de los grupos que precedieron a la NASW). A partir de 2005, el trabajo social forense se ha convertido en una especialidad acreditada para los trabajadores sociales que se reúnen regularmente con jueces, abogados, funcionarios de prisiones y otro personal del sistema legal. La Organización Nacional de Trabajo Social Forense (NOFSW) define la especialidad de la siguiente manera: “[El trabajo social forense] incluye la práctica del trabajo social que de alguna manera está relacionada con cuestiones legales y litigios, tanto penales como civiles. Las cuestiones relativas a la custodia de los hijos que implican separación, divorcio, negligencia, cese de la patria potestad; las implicaciones del maltrato de niños y cónyuges; los servicios de justicia de menores y adultos; los correccionales y el tratamiento obligatorio; todo ello entra dentro de esta definición.” La organización proporciona certificación profesional a nivel de diplomado a los miembros que cumplen sus normas.

La aparición del trabajo social forense como especialidad, junto con la expansión del interés por los programas para el cambio social y otros campos que requieren conocimientos de derecho, ha llevado a la creación de programas de titulación conjunta en trabajo social y derecho en varias universidades. La mayoría de estos programas permiten a un estudiante obtener tanto un JD (Juris Doctor; el título profesional en derecho) como un máster en trabajo social al final de cuatro años de cursos. Desde el lado de la profesión jurídica, la mayoría de las facultades de derecho de Estados Unidos ofrecen ahora a los estudiantes la opción de trabajar durante un semestre o más en diversos programas de interés público y pro bono (gratuitos) que se solapan con el trabajo social, como las clínicas de derechos de los inquilinos, violencia doméstica, derecho sanitario y derecho de familia.

Perspectivas de futuro

A pesar de la creciente preocupación por la vulnerabilidad ante los litigios, el trabajo social es un campo en expansión desde principios de la década de 2000. La demanda de trabajadores sociales en los hospitales se está ralentizando debido a los límites en la duración de las estancias de los pacientes. Sin embargo, el envejecimiento de la generación del baby boom generará una mayor necesidad de trabajadores sociales formados en gerontología. Otra área de creciente necesidad es el trabajo social con drogodependientes, ya que el sistema legal está colocando a más personas en programas de tratamiento que en prisión. Otra área de crecimiento es el trabajo social en las zonas rurales, que a menudo están desatendidas en comparación con las ciudades.

Revisor de hechos: Warren

A continuación se examinará el significado de trabajo social.

¿Cómo se define? Concepto de Trabajador social

Véase la definición de trabajador social en el diccionario. Véase la definición de trabajo social en el diccionario.
[rtbs name=”asuntos-sociales”]

Política Laboral

Aparte del contenido sobre la “Política Laboral en Norteamérica” y el contenido sobre la “Política Laboral” en general, puede interesar asimismo la Política de Migración, la política laboral en general, la “Precariedad Laboral” y la “Explotación Laboral“.

Recursos

Véase También

• Servicio social
• Trabajador social
• Asistencia social
• Servicios sociales
• Política social
• Ayuda social
• Trabajo social
• Animador
• Asistente social

Planificación social, Planificación del bienestar, Estado del bienestar, Filantropía, Pobreza

▷ Esperamos que haya sido de utilidad. Si conoce a alguien que pueda estar interesado en este tema, por favor comparta con él/ella este contenido. Es la mejor forma de ayudar al Proyecto Lawi.