El término “derecho del trabajo social” también se aplica a las normas legales que rigen la formación y la certificación de los trabajadores sociales. En el Reino Unido, por ejemplo, el título de “trabajador social” se definió por ley en abril de 2005. Sólo pueden utilizarlo las personas que hayan cumplido ciertos requisitos educativos y estén registradas en el Consejo General de Asistencia Social (en Inglaterra) o en sus homólogos de Escocia, Gales o Irlanda del Norte. En Estados Unidos, la regulación legal del trabajo social (al igual que la medicina, la odontología y otras profesiones sanitarias) está delegada por la Constitución en cada uno de los estados. En la mayoría de los estados, el poder legislativo establece un consejo de trabajo social y le otorga los poderes necesarios para definir la práctica del trabajo social, determinar las cualificaciones necesarias y otorgar licencias a los profesionales.