Este texto se ocupa de la Cesta de Monedas, como conjunto de divisas que se usan para establecer el valor de una determinada moneda. Antes de la ruptura del sistema de Bretton Woods, a principios de los años 70, no había necesidad de considerar la vinculación a una cesta de monedas, ya que las principales monedas eran estables entre sí. Sin embargo, tras la llegada de la inflación generalizada en marzo de 1973, quedó claro que esta situación no iba a continuar. Poco después, el Fondo Monetario Internacional (FMI) redefinió el valor de su activo de reserva artificial, el derecho especial de giro (DEG), en términos de una cesta de las 16 monedas de los países con más del 1% de las exportaciones mundiales en el periodo base. En los últimos años, las propuestas de fijación de cestas se han presentado principalmente en el contexto de Asia oriental.