Fidel Castro fue el máximo dirigente de un estado comunista, con importancia durante la guerra fria. El término “castrismo” se refiere originariamente a la doctrina y la práctica de la dirección revolucionaria cubana en general y de Fidel Castro en particular; por extensión se emplea también para designar las corrientes políticas, movimientos guerrilleros y dirigentes revolucionarios en América Latina que se inspiran del ejempló cubano. En 1953, Fidel Castro lidera una protesta contra el autoritario Fulgencio Batista, que está en el poder en Cuba. Castro incursiona infructuosamente en los cuarteles militares, es sometido a un juicio público y va a prisión. (Tal vez sea de interés más investigación sobre el concepto). Conocido por sus largos y apasionados discursos, se convierte en un héroe para el pobre pueblo cubano. Liberado de la prisión en 1955, Castro y su hermano viajan a México, donde se encuentran con el Che Guevara. En 1956 Castro regresa, y con sus partidarios, fomenta la revolución en la que los pobres los ven como libertadores. Castro continúa dando sus largos discursos a audiencias entusiastas, y la revolución es el resultado de muchos años de guerra de guerrillas y luchas propagandísticas. En 1958 los Estados Unidos implementan un embargo económico sobre Cuba. Castro incita a una huelga en todo el país y el Presidente Batista emplea un gran ejército para luchar contra Castro, pero no lo derrota a él y a sus partidarios. En enero de 1959 Castro y sus tropas entran en La Habana y Batista abandona la ciudad. Castro se convierte en Primer Ministro y Cuba se convierte en un Estado socialista revolucionario.
Los principales documentos de la doctrina castrista son, aparte los discursos del mismo. Fidel, las dos declaraciones de La Habana (1960 y 1962) y la declaración de la OLAS (Organización Latinoamericana de Solidaridad) de 1967, que resumen el mensaje revolucionario cubano para el continente. A través de estos discursos y documentos el castrismo aparece como una variante del marxismo leninismo considerablemente distinta de la doctrina y la estrategia tradicional del movimiento comunista en América Latina. Fracasado su intento de establecer relaciones diplomáticas o comerciales con Estados Unidos, Castro negoció acuerdos sobre armamento, créditos y alimentos con la Unión de Repúblicas Socialistas.