Este texto se ocupa del rescate financiero, que cabe definirlo como el rescate de una entidad económica (“la entidad rescatada”) de una insolvencia potencial o real, y el rescate es realizado por otra entidad económica (“el rescatador”). Por lo general, los rescates son ad hoc; pero la Unión Europea tiene un programa oficial de rescate, denominado “Rescate y reestructuración de empresas en dificultades”. En principio, tanto el rescatador como la entidad rescatada pueden ser un individuo, una empresa (ya sea financiera o no financiera), un gobierno o una organización internacional. Los casos más comunes son un gobierno nacional y/o un banco central que rescata una o más instituciones financieras nacionales, y una organización internacional (el Fondo Monetario Internacional, FMI) que rescata gobiernos miembros. Hay también información relativa al plan de rescate decreciente.