Genocidio de Ruanda
Las raíces del genocidio de 1994 en Ruanda se remontan a las luchas políticas entre hutus y tutsis que surgieron al final del período colonial belga en el decenio de 1950. Antes de la colonización europea, los hutus y los tutsis parecen haberse considerado más afines a las castas o clases que a los grupos étnicos. La invasión simultánea del Frente Patriótico Ruandés y la agitación interna desencadenaron una crisis política y militar en Ruanda que finalmente condujo al genocidio de 1994. La escasez de documentos internos de los grupos extremistas que organizaron el genocidio significa que no puede haber una respuesta definitiva a por qué los extremistas se decidieron por esta sangrienta solución. Sin embargo, a pesar de estas limitaciones, se puede construir una explicación ampliamente deductiva pero convincente que sea coherente con lo que se conoce sobre la progresión de los acontecimientos de 1990 a 1994 y con las limitadas pruebas disponibles de los propios extremistas. Esta explicación sugiere que los extremistas hutus llegaron a la decisión de iniciar un genocidio sistemático sólo después de haber llegado a la conclusión de que las opciones menos violentas para hacer frente a la amenaza tutsi habían fracasado y que otras posibles soluciones serían poco prácticas o insuficientes. Aquí se describen los factores pueden haber contribuido a esta percepción entre los grupos extremistas.