Depósito legal es un término técnico-bibliotecológico, que debe entenderse como una obligación jurídica-pública de depositar ejemplares de todo tipo de publicación, salvo las excluidas normativamente, destinadas a los organismos que la ley establezca. El objetivo principal del depósito legal es preservar las publicaciones que contienen el patrimonio intelectual y cultural de una nación y ponerlas a disposición de las generaciones futuras. El depósito legal es una obligación legal a nivel nacional que exige a los editores depositar un cierto número de ejemplares de los documentos que publican en un depósito, es decir, un lugar reconocido de depósito legal. Una publicación está sujeta al requisito del depósito legal cuando se pone a disposición del público, ya sea para su venta o gratuitamente.
En muchos países, las disposiciones legales nacionales exigen que se depositen por lo menos dos ejemplares de un documento publicado; sin embargo, hay excepciones. Por ejemplo, en Portugal, los editores están obligados por ley a depositar 11 ejemplares de un material publicado, mientras que en Malasia se exige que se depositen cinco ejemplares en la Biblioteca Nacional de Malasia.