La investigación sobre la paternidad en los hogares biparentales muestra un aumento notable y estadísticamente significativo de la participación de los hombres en la crianza, tanto en términos absolutos como en relación con las madres. Sin embargo, al mismo tiempo, los niveles medios de interacción, disponibilidad y responsabilidad de los padres con los hijos están muy por detrás de los de las madres. Las estrategias de medición varían. La participación del padre está determinada por múltiples factores, sin que haya un único factor responsable de los diferentes tipos de participación. Además, los estudios suelen informar de los efectos contradictorios de factores como los ingresos, la educación, la edad, el tamaño de la familia y el momento del nacimiento. Uno de los hallazgos más consistentes es que los hombres se involucran más con los hijos que con las hijas, especialmente con los hijos mayores. Sin embargo, algunos estudios recientes no han encontrado diferencias en la participación del padre según el sexo del niño, lo que parece sugerir que la preferencia de los padres por los hijos puede estar debilitándose. Algunos investigadores también han descubierto que si los padres se involucran durante el embarazo o la primera infancia, tienden a mantener esa participación más adelante en la vida de los niños. Aunque las comparaciones entre los hijos de padres divorciados y los de familias primogénitas muestran más problemas en el primer grupo, las diferencias entre ambos son generalmente pequeñas en varias medidas de resultados y no aíslan necesariamente la influencia del divorcio o de la participación del padre.