Economía de la Protección Social
Este texto se ocupa de analizar los aspectos económicos de la protección social. Se considera la protección social como una institución pública destinada a reducir la pobreza y la desigualdad de ingresos y a proporcionar protección a todos contra los principales riesgos de toda la vida. Sin embargo, el Estado no es la única institución que lo hace. El mercado y la familia también pueden hacerlo, pero con sus propias limitaciones. El mercado no redistribuye y la familia carece de universalidad. La protección social no se limita al gasto; también opera a través de leyes y reglamentos que afectan a las decisiones del mercado y de la familia (salarios mínimos, deberes parentales). Es importante poder evaluar los resultados de la protección social y compararlos entre países y a lo largo del tiempo. Se trata de una tarea difícil pero factible. Una de las grandes preocupaciones de los diseñadores de políticas es la sostenibilidad política de los programas sociales, ya que la falta de apoyo político puede conducir a su lenta erosión.