Chequia
Tras un siglo de caótica historia, la República Checa sigue enfrentándose a numerosos retos, entre los que destaca la necesidad de frenar el envejecimiento de su población. En 2004, un informe oficial indicaba que, por primera vez desde 1994, la población había dejado de disminuir. Los menores de quince años (20% en 1990) representan ahora solo el 14,4% de la población (2011), y no hay reemplazo generacional para las mujeres nacidas en la década de 1970. Desde 2003, un programa gubernamental pretende atraer a 25.000 inmigrantes al año, ya que el Gobierno considera que no son los trabajadores ilegales, que impulsan la economía sumergida, los que pueden influir en la situación demográfica.