El método de autointegración se caracteriza por tratar de superar las lagunas mediante la aplicación de normas o principios pertenecientes al propio orden jurídico en que se han producido dichas lagunas, ya se trate del ordenamiento general, ya de alguno de los sectores del mismo. En derecho privado, la laguna jurídica se trata de una omisión o ambigüedad en un documento legal que permite evadir la intención del documento. Las lagunas jurídicas surgen a través de la aprobación de leyes, la promulgación de reglamentos, la redacción de contratos o las decisiones de los tribunales. Una laguna legal permite a un individuo o a un grupo utilizar alguna laguna en las restricciones o requisitos de la ley o del contrato para obtener una ventaja personal sin infringir técnicamente la ley o el contrato. En respuesta, los legisladores y reguladores trabajan para aprobar reformas que cierren la laguna. Las lagunas existen porque es imposible prever todas las circunstancias o conductas que surgirán en virtud de la ley o en respuesta a ella. Las lagunas suelen perdurar durante un tiempo porque pueden ser difíciles de cerrar. Los que se benefician de una laguna jurídica presionarán a los legisladores o reguladores para que la dejen abierta.