La Comunidad y Mercado Común del Caribe (CARICOM) se formó en 1973 mediante el Tratado de Chaguaramas para sustituir a la Asociación de Libre Comercio del Caribe, que se había fundado en 1965. Cuenta con 15 Estados miembros: Antigua y Barbuda, Bahamas (de la Comunidad, no del Mercado Común), Barbados, Belice, Dominica, Granada, Guyana, Haití, Jamaica, Montserrat, San Cristóbal y Nieves, Santa Lucía, San Vicente y las Granadinas, Surinam y Trinidad y Tobago. Anguila, Bermudas, las Islas Vírgenes Británicas, las Islas Caimán y las Islas Turcas y Caicos son miembros asociados. La Conferencia de Jefes de Gobierno es la autoridad decisoria final de la Comunidad y se reúne anualmente, o con mayor frecuencia si es necesario. Desde 1998, el Consejo de Ministros, formado por los ministros responsables en cada Estado miembro de los asuntos comunitarios, se reúne para desarrollar planes de cooperación e integración comunitaria. La Secretaría presta servicios a la Conferencia y al Consejo. Sin embargo, el proceso de integración avanzó poco hasta los años 90. El intento de fomentar el comercio intrarregional mediante la creación de una zona de libre comercio dentro de la Comunidad, con una población de 5.500.000 habitantes, se vio obstaculizado de forma persistente por las disputas políticas y por el mantenimiento de las restricciones a la importación en un esfuerzo por proteger las economías nacionales de los distintos países insulares. Sin embargo, en la década de los 90, los líderes caribeños se preocuparon cada vez más por el impacto en sus pequeñas y a menudo frágiles economías de otros acontecimientos regionales y mundiales, como la consolidación de poderosos bloques comerciales regionales a través del mercado único europeo y el Acuerdo de Libre Comercio de América del Norte, y la globalización y la liberalización del comercio en el marco de la Organización Mundial del Comercio.