Este texto se ocupa de la previsión económica a corto plazo, no la relacionada con la metereología. Previsión, predicción y profecía son palabras que implican la capacidad, o al menos denotan un intento, de describir o sugerir lo que ocurrirá en el futuro. Sin embargo, estas tres palabras no son sinónimas. En el caso concreto del futuro económico, la distinción que suele hacerse es que “profecía” implica una capacidad mística, posiblemente otorgada por Dios, para predecir, mientras que los conceptos que subyacen a la terminología “previsión” y “predicción” tienen un origen mucho más cotidiano. Por esta razón, las profecías, cuando son erróneas, suelen tacharse de falsas. En cambio, las previsiones y predicciones, cuando no se cumplen, suelen caracterizarse como simplemente inexactas o, en el peor de los casos, incorrectas.