Se cultivan dos variedades principales por sus raíces: la yuca amarga (Manihot utilissima) y la yuca dulce (Manihot opi). La yuca amarga se utiliza para alimentar a millones de personas, aunque contiene una toxina llamada manihotoxina, que puede eliminarse simplemente enriando. La planta se ralla y se utiliza para hacer gachas; también se come en forma de empanadas secas o al vapor. En Brasil, la feijoada es un plato popular elaborado con alubias negras y harina de mandioca. El cultivo es muy sencillo (esquejes, escarda) y la cosecha dura unos seis meses. La mandioca amarga, cultivada en plantaciones, produce tapioca. Brasil, Nigeria, la República Democrática del Congo, Tailandia, Ghana e Indonesia son los principales productores mundiales de mandioca.